Luego de la sorpresiva revelación de Ecopetrol, en el sentido de que está en acercamientos con la estatal Petróleos de Venezuela S.A (PDVSA), tendientes al suministro de gas natural a Colombia a partir del 2024, quienes conocen de cerca a esta empresa le hicieron una advertencia a la compañía de la iguana y al país: PDVSA no puede tener control en esa operación.
La alerta se dio la semana pasada, durante el Foro Regulatorio Internacional 2023, organizado por la Asociación Colombiana de Gas Natural (Naturgás), en el que surgieron preocupaciones en torno al proyecto.
Allí, el experto Álvaro Ríos Roca, socio Director de Gas Energy Latin América, dejó claro que el gas que hay en Venezuela es el más barato de la región y para el caso de Colombia es el que está más cerca, pero que cualquier modelo de negocio no debe dejarle ni la construcción ni la operación, bajo ningún motivo, a PDVSA.
Lo anterior, porque según Ríos, esta es una “empresa irresponsable, que a la fecha tiene desmantelados sus equipos técnicos”, lo cual hoy no le da el conocimiento para un proyecto como el que se quiere evaluar.
Por ello, sugirió que el sector privado colombiano es el que debería “meterle mano” al gasoducto Antonio Ricaurte y firmar un contrato de abastecimiento con empresas privadas que ya producen gas en Venezuela.
Y es que si bien Ecopetrol aclaró que el 18 de octubre la Oficina de Control de Activos Extranjeros de Estados Unidos (Ofac) levantó las restricciones por seis meses, para que se puedan realizar transacciones de producción, extracción, venta y exportación de petróleo o gas desde Venezuela, Ríos Roca insiste que hay que hacer una cadena de abastecimiento.
Esto, aprovechando las energías políticas actuales, pero sin PDVSA, porque por todo lo que ha pasado en Suramérica, no cumple.
Fuente Portafolio